En diferentes situaciones hemos empleado mal el concepto de sonido y ruido, consideramos que significan lo mismo, pero no es así, existe diferencia entre estos términos. Revisando la definición de sonido proporcionada por la física, se refiere como sonido a aquellas ondas mecánicas de presión que viajan a través de la materia o medio, siendo esta ondas armónicas al oído humano, en cambio el ruido es definido como aquel sonido molesto o perturbador, es decir, es aquel que genera una sensación auditiva inarticulada, generalmente desagradable y comprendida como contaminación acústica presente a nuestro alrededor (medio) y provenientes de diferentes fuentes como maquinaria, vehículos ruidosos, el uso indiscriminado del claxon (pito), música amplificada a niveles sonoros molestos, incluso, la disonancia en la combinación inarmónica de palabras en una frase, por ejemplo: subir para arriba, subir pa arriba, pensé para mis adentros, baja para abajo, su obsesión es la fijación […], a esta combinación se le conoce como cacofonía o vicio del lenguaje que afecta al discurso.

Por lo anterior, se concluye que el ruido se define como una mezcla desordenada y compleja de sonidos no deseados, sin calidad musical. Puede producir efectos adversos sobre la salud e interferir con la comunicación, el desempeño laboral y el descanso. El grado de lesión que puede producir el ruido depende de su naturaleza, del tiempo de exposición y de factores individuales que se relacionan con la susceptibilidad.

Los parámetros usados para la medición de ruido ocupacional, corresponden a los estipulados en la normatividad vigente, tanto a los referentes nacionales como internacionales, que establece que los equipos o instrumentos deben cumplir las especificaciones de sonómetros, Tipo 1 o mínimo Tipo 2 y los sonómetros integradores promediadores deben ser de clase P.